No sé cómo deben empezarse los diarios; me refiero a la primera frase, el primer párrafo, la declaración de intenciones. No sé a quién me dirijo, ni siquiera sé si alguien leerá estas líneas algún día, quizás se las acabe tragando el mar. Hay muchos chismes en el fondo del mar, no solo desperdicios, hay pequeños tesoros extraviados, secretos para nadie.
El mar es todo mi mundo, hasta ahora lo ha sido, pero todo está a punto de cambiar. Os seré sincera: tengo miedo. Mañana dejaré definitivamente el mar y me instalaré en tierra seca, en el palacio de mi amiga Cenicienta. Empiezo este diario para dejar constancia de mis impresiones y para combatir mis temores. Mi padre es el rey de los océanos, aquí siempre he sido la princesa, querida y cuidada por todos, desde el gran tiburón blanco hasta el más humilde caballito de mar. Pero ya es hora de abandonar las profundidades para aprender más de la vida; fuera existe un mundo distinto e inmenso por descubrir. Ya tengo la mochila preparada.
Nueba uesped en casa
El mar es todo mi mundo, hasta ahora lo ha sido, pero todo está a punto de cambiar. Os seré sincera: tengo miedo. Mañana dejaré definitivamente el mar y me instalaré en tierra seca, en el palacio de mi amiga Cenicienta. Empiezo este diario para dejar constancia de mis impresiones y para combatir mis temores. Mi padre es el rey de los océanos, aquí siempre he sido la princesa, querida y cuidada por todos, desde el gran tiburón blanco hasta el más humilde caballito de mar. Pero ya es hora de abandonar las profundidades para aprender más de la vida; fuera existe un mundo distinto e inmenso por descubrir. Ya tengo la mochila preparada.
Nueba uesped en casa
Ola amigos, soi Winnie! Seguro k muchos me konozereis por las abenturas que e korrido con mis "amigos" Tigger, Piglet, Conejo, Igor...
Lo k pasa es k no os kuentan las kozas bien i klaro, luego ya tenemos el lio. Por kulpa de las pelikulas k ago se piensan k soi el oso de Kristopher Robin, i no es cierto. El niño ese kabezon con zapatos de niña es un aktor también i es un plasta k no lo aguanta ni su madre. No os fieis de la kara de anjelito k pone delante de la kamara. Quando se le cruzan los kables, me eskonde la miel i me dize k tengo que adelgazar. KabrOn! Donde se a visto un oso de peluche con la zinturita de una silfide? I encima se mete con mi "pesima ortografia", el sabelotodo de los kojones.
Bueno, degemos al niñato ese. La question es que os keria contar que yo, en realidad, soi el osito de Zenizienta. Fui el primer regalo de su bida. Ya sabeis k Zenizienta yebaba una bida de perros antes de konozer al tio forrado ese, verdad? Pues resulta k un dia k estaba en el merkado comprando, la biegecita que me zurzio, k tenia una paradita donde bendia cosas barias echas por eya, se apiado de la niña i me dio. Claro, Zenizienta estava k ni se lo kreia. I inkluso aora k tiene una bida de reina me sigue manteniedo a su lado i me sienta siempre apollado en la almoada de su kama. Bueno, me sentava asta k se kaso. El principito es mui fino i señoron, i no le resulta "apropiada" mi presenzia ai. Asi k mi amante dueña me a kolokado en la kama de imbitados. E oido dezir a una de las palomas mensaggeras (k son unas chismosas de padre i mui señor mío) k llegara pronto una imbitada a okupar la kama en la k me siento. Espero k me trate bien i no me dege tirado por el suelo. No soporto k se me suban los akaros!
A ver si nos entendemos.
A ver si nos entendemos.
Qué pasa, chavalotes.
Sí, soy yo, el viejo Wile. Antes de pasar a otro asunto, conviene dejar las cosas claras: si os creíais que me iba a echar la vida haciendo el gilipollas detrás del Correcaminos, estabais muy equivocados. No señor, todo tiene un límite: un día me planté en el tugurio donde los dibujantes se reunían después de sus dudosas "sesiones de trabajo" y tuvimos una pequeña conversación:
- Señores, hasta aquí hemos llegado. Tenéis veinticuatro horas para dibujar algo creíble que me libere del bicho ese. He hablado con los de ACME y me han ofrecido un buen contrato como probador de sus productos. Estoy harto del bicho, de vosotros y del puñetero desierto.
- Pero Wile, si eres un ídolo para medio mundo…
- Sí, un ídolo que no para de llevar hostias. Ya está bien. Buscaros otro pardillo.
- Pero tu contrato dice que…
- Mi contrato me la suda. Y como os pongáis tontos les digo a los de ACME que me pasen una buena bombita de esas que…
Al final se achantaron, y aunque la historieta nunca salió oficialmente a la luz, ahí os dejo el enlace: anda por Internet, y es la prueba de que gané la batalla. Contra ellos y contra el puñetero bicho.
http://www.metacafe.com/watch/4015500/coyote_catches_road_runner/Sí, soy yo, el viejo Wile. Antes de pasar a otro asunto, conviene dejar las cosas claras: si os creíais que me iba a echar la vida haciendo el gilipollas detrás del Correcaminos, estabais muy equivocados. No señor, todo tiene un límite: un día me planté en el tugurio donde los dibujantes se reunían después de sus dudosas "sesiones de trabajo" y tuvimos una pequeña conversación:
- Señores, hasta aquí hemos llegado. Tenéis veinticuatro horas para dibujar algo creíble que me libere del bicho ese. He hablado con los de ACME y me han ofrecido un buen contrato como probador de sus productos. Estoy harto del bicho, de vosotros y del puñetero desierto.
- Pero Wile, si eres un ídolo para medio mundo…
- Sí, un ídolo que no para de llevar hostias. Ya está bien. Buscaros otro pardillo.
- Pero tu contrato dice que…
- Mi contrato me la suda. Y como os pongáis tontos les digo a los de ACME que me pasen una buena bombita de esas que…
Al final se achantaron, y aunque la historieta nunca salió oficialmente a la luz, ahí os dejo el enlace: anda por Internet, y es la prueba de que gané la batalla. Contra ellos y contra el puñetero bicho.
A mayores, les saqué dos buenas instantáneas de mi victoria final: a la primera le puse el texto yo mismo, y la segunda me la pasaron con muy mala calidad; de ese modo siempre podrían decir que era una falsificación, que no la habían dibujado ellos. Bueno, me da igual. El caso es que aquí las tenéis:
Y ya está. Terminado el asunto del Correcaminos. Luego trabajé en ACME un tiempo, pero también me cansé. Y ahora vivo de mis trapicheos, que no os voy a contar cuáles son. En fin, ahora que ya nos conocemos un poco, igual un día de estos vengo a pasar un rato por aquí. Veremos.
